UNA FRAGANCIA PARA TU BODA (I)

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Ana, a la que podeís encontrar en el fabuloso espacio virtual En mitad del medio, además de ser una persona encantadora es una erudita del mundo del perfume y de la cosmética en general, y ha donado a Cerezas de Tul desde su experiencia y sabiduría un amplio dossier explicativo que hemos titulado UNA FRAGANCIA PARA TU BODA y que vamos a publicar en nuestro espacio en 4 entregas. Aprovechamos esta primera para agradecer a Ana su espléndida y desinteresada colaboración en Cerezas de Tul con la que de seguro, nos consta, volveremos a contar. Los capítulos 2, 3 y 4 podréis encontrarlos los próximos 11, 21 y 29 de Junio. No os los perdáis.

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Cosas que hay que saber para elegir una fragancia:
Normalmente existen diferentes presentaciones de un mismo aroma: el extracto de perfume, agua de perfume (EDP), agua de toilette (EDT) y el agua fresca o de verano. La diferencia entre ella esencialmente es la concentración del perfume. Un elixir es más intenso, más concentrado (más puro), más duradero y con menos alcohol en la fórmula que un agua de perfume y éste será más intenso, más concentrado etc. que el agua de toilette.
Los elixires o esencias puras sólo los comercializan determinadas firmas (Chanel, Dior, Guarlein) y son perfumes muy caros, en tamaños muy pequeños, sin spray y con una textura oleosa.
Los más vendidos son las EDT y EDP. Generalmente, en el olor (aroma) son muy similares, aunque en ocasiones las notas olfativas varían entre el EDP y el EDT.
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¿Dónde y cómo me perfumo?
Lo ideal es crear una “nube” de fragancia y pasar por ella, dejando que nuestro perfume se pose en nuestra piel como una delicada gasa. Pero como la economía no esta para estas coqueterías, tenemos otras opciones:
- Perfumar las zonas calientes de nuestro cuerpo: nuca, muñecas, cuello, tripa, parte trasera de las rodillas y tobillos.
- Usar nuestra fragancia junto con su línea de cuerpo: leches y/o cremas perfumadas, gel de ducha y desodorantes. Todo ello, sobre todo las leches y cremas perfumadas, hacen que la duración de nuestra fragancia y la intensidad de la misma sean de 24 horas. Además, en verano son una opción muy apetecible para los días calurosos en los que un EDP puede resultar un poco pesado.
- Perfumar la ropa. Pero ojo, con mucho cuidado porque hay tejidos que se manchan y estropean con el uso directo del EDP y si la prenda está muy viciada de otros aromas puede resultar una mezcla no grata. Esta opción es muy útil para las personas que modifican mucho las fragancias por su PH.
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